La Belle Epoque
Se denominó Belle Epoque al período que abarca
desde fines del siglo XIX hasta la Primera
Guerra Mundial (1914), caracterizado por un transitorio bienestar económico y
una gran euforia y optimismo, en las clases altas y medias de los países
industrializados de Europa y algo en los EE.UU.. Esto fue producto de los avances tecnológicos y científicos de la
época, del crecimiento de las ciudades y de la reducción de la jornada laboral
que creó más tiempo libre.
Aspectos políticos
A principios del siglo XX, Europa
dominaba el mundo. Ningún continente escapaba de su hegemonía. Durante la Belle
Époque, el imperialismo era considerado una política de Estado aceptable y válida
y era justificado por que se le consideraba como generador de valiosas fuentes
de materia prima, así como de nuevos mercados para la creciente producción industrial, lo cual era crucial para países europeos carentes de
materias primas y con mercados internos ya bastante explotados. Gran Bretaña se
había constituido como el más importante imperio colonial.
En toda Europa, la mano
de obra se organizó en sindicatos o en partidos políticos: en este período aparecen los
primeros partidos socialistas europeos, cada vez más influyentes.
Aspectos Sociales
La tendencia general en la gente de esta época era optimista y ambiciosa
respecto al porvenir, gracias a las innovaciones tecnológicas que se
difundieron masivamente. El positivismo (defiende la fe en la
ciencia) y el cientifismo (que proclama
que la ciencia lo explica todo) hicieron su
aparición y empezaron a ganar abiertamente adeptos entre los intelectuales. La
Belle Époque se hizo notar sobre todo en la arquitectura de los boulevards de las
capitales europeas, en los cafés y los cabarets, en los
talleres y galerías de arte, en las salas
de conciertos y en los salones frecuentados por una burguesía y unas clases medias que sacaban
provecho del desarrollo económico.
Las exposiciones
universales son los símbolos de la Belle Époque, por su
insistencia en la promoción del progreso científico y por atraer la atención a
nivel realmente mundial. Tales exhibiciones servían igualmente para resaltar
ante un público mundial la fe en la ciencia y la tecnología, exaltando la
capacidad del individuo para dominar y vencer los obstáculos que le planteaba
la naturaleza.
Aspectos económicos.
La economía empezó a "globalizarse" durante este
periodo en la medida en que, gracias a la expansión europea, cada vez más áreas
del planeta estaban en dependencia económica debido al auge de la industria y el desarrollo del comercio internacional. La Revolución Industrial en Europa causó que desde fines del siglo XIX la producción masiva
de materias primas en las colonias, mientras que Europa y Estados Unidos se especializaban en la producción industrial, cuyos
mercados se hallaban ahora en todo el mundo. Además los avances tecnológicos y
las nuevas fuentes de energía (reemplazo del carbón y el vapor por la electricidad y el petróleo) permitieron que la producción industrial fuera más
barata y en cantidad mucho mayor que en épocas pasadas.
La información, por vez primera, empezó a difundirse fácilmente a
grandes distancias, y de una forma masiva y veloz gracias al ferrocarril, al
telégrafo y al teléfono. La tecnología hacía que los
costos del transporte se redujeran
drásticamente y que las mercancías de toda especie pudieran recorrer distancias
larguísimas.
Arte y literatura y otros hechos de la belle epoque
El cinematógrafo: algunos años
después de las primeras proyecciones públicas en París, el cinematógrafo
conquistó el mundo. Los primeros espectáculos tuvieron lugar en el gran café de
París el 29 diciembre 1894, al ritmo de 20 imágenes por segundo. Destacaron los
hermanos Auguste y Louis Lumière , que hicieron un ensayo de película de
ficción con él regador regado.
La invención del cómic: un grupo de
nuevos autores norteamericanos empezó a publicar en los periódicos los
episodios de una historia por entregas destinada a las masas donde la
ilustración era más importante que el texto: The Yellow Kid,de Richard
Outcault.
El Art nouveau: al igual que los
artistas vieneses, los decoradores franceses trataron de imponer en la vida
cotidiana una nueva estética. En sus calendarios y carteles más que en sus
cuadros, Alfons Mucha, que había estudiado en Viena y en Praga, adoptó una
línea nueva, hecha de curvas y sinuosidades.
Galdós: el realismo de Balzac y el
naturalismo de Zola ejercieron gran influencia sobre la novela española del
final de siglo. Pérez Galdós decía que la novela debía ser "la imagen de
la vida". De esta orientación dieron fe de sus más de 70 novelas, muchas
de ellas liberales y progresistas.
La regenta: Clarín hizo de Oviedo,
con el nombre de Vetusta, el escenario de la Regenta, novela que causó
escándalo. Ana Ozores es conocida como la regenta por estar casada con don Víctor
de Quintanar, antiguo regente de audiencia. Ana tenía dos caminos para evadirse
de una existencia frustrante: la vía mística, encarnada en Fermín de Pas, y la
ensoñación sensual, encarnada en don Álvaro de Mesía, don Juan provinciano. Ana
descubre que el magistral la y los rechaza, entonces comienza una relación con
don Álvaro. Victor los descubre y, presionado por el magistral, reta a duelo a
Álvaro, quien le mata y abandona vetusta. Ana vivirá una soledad sin esperanza.
El automóvil y la aviación. El final
del siglo XIX presenció la aparición de dos grandes inventos que iba a
caracterizar el siglo siguiente: el automóvil y el avión. Esta fue la segunda
revolución de los transportes en los tiempos modernos. Los pioneros del
automóvil fueron principalmente hijos de familias acomodadas, el alemán Carl
Benz, su compatriota Gottlieb Daimler (que finalmente fusionaron sus empresas),
los primos Peugeot y Henry Ford. Durante la Primera Guerra Mundial tanto el
automóvil, el avión comenzaron a utilizarse masivamente, y tras ella el
automóvil sustituyó definitivamente en a la tradición animal y se generalizó en
Europa la producción de coches en serie.
El cubismo: Pablo Picasso tenía
apenas 25 años cuando rompió con todas las tradiciones pictóricas en su cuadro las chicas de la calle Aviñó., Que
significó el nacimiento del cubismo. Este cuadro representaba a las pupilas de
un prostíbulo de la calle Aviñó de Barcelona. El pintor representaba "la
naturaleza mediante el cilindro, la esfera y el cono".
El futurismo: Filippo Tommaso
Marinetti del fundador del futurismo, un movimiento que tuvo una considerable
influencia en los medios artísticos. Firmó en 1910 el manifiesto de los
pintores futuristas y se propuso representar el movimiento descomponiendo en
fases sucesivas, de donde pasó a la abstracción.
El naufragio del Titanic. En 1912,
la compañía británica White Star Line votó el barco más hermoso del mundo.
Millonarios norteamericanos y aristócratas europeos se disputaron las plazas
para el primer crucero. La noche del 14 al 15 abril 1912 el barco chocó contra
un deber y se hundió en el océano helado mientras la orquesta del salón de
baile interpretaba más cerca de ti, Dios
mío. En la catástrofe murieron más de 1500 personas.
Los últimos destellos de Europa.
Los primeros años del siglo XX
representaron el apogeo de la expansión europea en el mundo. Sin embargo, el
ascenso de los nacionalismos y la guerra armamentística hacían presagiar una
guerra suicida.
La triple alianza (Alemania y
Austria Hungría y en la cual Italia participaba de un modo ambiguo) movida
fundamentalmente por ambiciones territoriales, estaba cada vez más enfrentada a
la triple entre en, formada por el imperio ruso, Francia y Gran Bretaña. Estos
países comenzaron a aumentar los efectivos de armas en tiempo de paz: la
carrera hacia la guerra había comenzado. La
primera guerra mundial comenzó el 28 de julio de 1914.
Bibliografía:
-Enciclopedia Larousse Historia del Mundo, Volumen 8 "La Gran Crisis"
-Wikipedia.
-Otras fuenes de google.